¿Por qué se nos montan los Músculos? En este nuevo artículo veremos las causas, la forma de aliviar, y la prevención de los molestos calambres musculares.
Los calambres musculares son contracciones involuntarias y dolorosas que afectan a los músculos, lo que parecerá que se nos «montan» los músculos. A menudo se presentan de forma repentina y pueden durar desde unos segundos hasta varios minutos.
Estos episodios pueden causar molestias significativas y afectar el rendimiento físico en las actividades cotidianas y deportivas. En este artículo veremos las causas que hay detrás de los calambres musculares, así como técnicas para aliviarlos y prevenirlos.
Por lo general, es muy común que se nos «monten» los gemelos, aunque podría darse el caso en prácticamente cualquier músculo… en mi caso por ejemplo se me tienen subido los cuádriceps, los femorales, alguna vez los antebrazos, así como los aductores en un par de ocasiones (fue de lo más doloroso), incluso varias veces «la papada» (músculo PLATISMA) y que es muy molesto también.
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Los calambres musculares pueden tener muchas razones para aparecer, aunque no suelen ser graves, pero sí que pueden presentarse en el momento más inoportuno, y durar varios días. ¿Se puede prevenir esta situación? ¿Cómo?
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Músculos montados y calambres musculares
Todavía existen muchísimas incógnitas en torno a los músculos, especialmente si hablamos de cuando se montan. Se denomina así a la contracción involuntaria que hace que el músculo se tense de manera dolorosa. Estos espasmos musculares pueden llegar a durar horas, produciendo un dolor agudo continuado muy molesto.
No es común que los calambres den lugar a otras consecuencias más que las propias molestias, aunque estas pueden ser moderadas y fastidiar una sesión de entrenamiento, por ejemplo. Una manifestación clara de estos calambres se da en el gemelo, cuando «se sube», es decir, se contrae y se agarrota, impidiéndonos caminar.
Hay que dejar claro que los calambres, aunque están muy relacionados, no son lo mismo que las contracturas musculares. Ambas son contracciones involuntarias continuadas en el tiempo pero, a diferencia del calambre, las contracturas pueden durar mucho más tiempo.
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¿Por qué se montan los músculos?
El calambre muscular puede darse por diversas causas:
- La falta de oxígeno
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- El desequilibrio de electrolitos: Los electrolitos, como el calcio, potasio, sodio y magnesio, son fundamentales para la función muscular adecuada. Cualquier desequilibrio en estos electrolitos puede causar calambres musculares.
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- La irritación nerviosa
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- El sobreestiramiento de la fibra
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- La falta de estiramiento adecuado: El estiramiento previo y posterior al ejercicio es esencial para preparar y relajar los músculos. La falta de estiramiento adecuado puede aumentar el riesgo de calambres musculares.
. - La deshidratación: Cuando el cuerpo no recibe suficiente agua, los músculos pueden contraerse involuntariamente debido a una disminución en el equilibrio electrolítico.
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- La fatiga muscular o el sobre-esfuerzo: El agotamiento de los músculos debido a una actividad física extenuante o prolongada puede aumentar la probabilidad de calambres musculares. La fatiga muscular reduce la capacidad de los músculos para relajarse, lo que puede conducir a contracciones involuntarias.
. - Condiciones Médicas: Algunas enfermedades y afecciones médicas, como la diabetes, enfermedades neuromusculares y problemas de circulación, pueden aumentar la predisposición a los calambres musculares.
. - Clima Frío: Exponerse a temperaturas frías puede provocar que los músculos se contraigan como mecanismo de protección.
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¿Cómo aliviar los calambres?
- Estiramiento suave: Cuando un calambre ocurre, se puede aliviar mediante el estiramiento suave y controlado del músculo afectado. Estirar suavemente el músculo opuesto también puede ayudar a relajar la contracción.
. - Masajes: Los masajes pueden ayudar a relajar los músculos y reducir la intensidad de los calambres. Se recomienda aplicar presión suave sobre el área afectada y realizar movimientos circulares con los dedos.
. - Aplicación de calor o frío: Aplicar una compresa caliente o una bolsa de hielo en el área afectada puede ayudar a reducir la incomodidad y la inflamación asociadas con los calambres musculares.
. - Hidratación: Mantenerse bien hidratado es esencial para prevenir y aliviar los calambres musculares. Beber suficiente agua durante el día ayudará a mantener un equilibrio adecuado de electrolitos.
. - Suplementos de electrolitos: En algunos casos, especialmente para personas que realizan actividades físicas intensas o sudoración excesiva, los suplementos de electrolitos pueden ser útiles para prevenir calambres musculares.
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Cómo prevenir
- Calentamiento y estiramiento: Antes de iniciar cualquier actividad física, es crucial realizar un calentamiento adecuado seguido de estiramientos para preparar los músculos y evitar la fatiga muscular.
. - Hidratación adecuada: Mantenerse hidratado es esencial para evitar la deshidratación y el desequilibrio de electrolitos que pueden desencadenar calambres musculares.
. - Evitar la sobreexigencia: Evitar el sobreentrenamiento y la realización excesiva de ejercicio puede ayudar a prevenir los calambres musculares debido a la fatiga muscular.
. - Uso de ropa adecuada: En climas fríos, es importante vestirse adecuadamente para mantener los músculos abrigados y prevenir calambres por exposición al frío.
. - Considerar la suplementación: En casos de deficiencias de electrolitos diagnosticadas por un profesional de la salud, se puede considerar la suplementación para mantener un equilibrio adecuado.
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Conclusión
Los calambres musculares son una molestia común que afecta a muchas personas en diversas situaciones. La prevención y el alivio de estos calambres se basan en prácticas sencillas, como el calentamiento, estiramiento, hidratación adecuada y la atención a los electrolitos. Si bien los calambres musculares generalmente no representan una preocupación médica grave, si ocurren con frecuencia o están asociados con otras condiciones médicas, es importante buscar la opinión de un profesional de la salud para descartar posibles problemas subyacentes. Mantener un estilo de vida saludable y equilibrado es la clave para minimizar la aparición de calambres musculares y disfrutar de una buena calidad de vida.
