Cuando una persona hace dieta bien para bajar de peso y grasa, o simplemente quiere mantener su peso a raya, debe valerse de todos los recursos conocidos (siempre buscando lo natural). Hacer EJERCICIO y mantener una DIETA adecuada son elementos clave, y la incorporación a la dieta de ciertos alimentos pueden ayudar a mejorar o acelerar el metabolismo… en otras palabras, se puede acelerar la velocidad a la que el cuerpo quema calorías.
A continuación os presentamos una lista de alimentos que os ayudarán a acelerar el metabolismo, pero antes de ello comentaros que consumir cualquiera de éstos alimentos NO ASEGURA que vayais a perder una cantidad importante de peso, ya que ésto es adicional a un verdadero y planificado régimen de alimentación, combinado con ejercicio físico.
Por supuesto, también es conveniente el consumir otro tipo de alimentos como carnes magras tanto de res, pollo y pescado por mencionar las más comunes. A fin de cuentas, la dieta deberá ser sana ante todo, variada y equilibrada.
– Carbohidratos Complejos (Avenas y cereales de granos enteros): Mantienen los niveles de insulina bajos después de comer evitando el envío de las señales al cuerpo para que almacene grasa
– Alimentos ricos en Calcio: El calcio es un desencadenante metabólico. Un estudio de la Universidad de Tennessee demostró que personas a dieta que consumían de 1.200 a 1.300 miligramos (mg) de calcio al día perdían casi el doble de peso que personas a dieta consumiendo menos calcio.
– Pimientos picantes: La capsaicina contenida en los pimientos picantes acelera el metabolismo al incrementar la frecuencia cardíaca. Comer una comida picante puede aumentar el metabolismo hasta en un 25%, manteniendo la duración en la quema de calorías hasta 3 horas después de haber terminado de comer. Adicional al aumento del metabolismo, los alimentos picantes aumentan la sensación de saciedad.
Los chiles jalapeño, habanero, pimienta de cayena y otros tipos de picantes directamente aceleran tu metabolismo y tu circulación. De hecho, comer chiles no sólo acelera el metabolismo, también reduce los antojos. Esto está relacionado con su contenido de capsaicina, un ingrediente que estimula los receptores de dolor en el cuerpo, temporalmente aumentando la circulación y el ritmo metabólico. Si has tenido sudoraciones después de comer un tamal muy picante, esto no debe sorprenderte. De hecho, estudios han demostrado que comer picante puede acelerar el metabolismo en un 25%, y este estímulo suele durar hasta 3 horas.
UN AVISO: por supuesto, NO conviene abusar de cualquier alimento picante, aunque los beneficios por otro lado sean positivos.
– Ajo y Jengibre: El jengibre, como el ajo, aumentan la temperatura corporal y ayudan a estimular los mecanismos de su cuerpo para quemar grasa.
El Jengibre tiene la propiedad de aumentar el metabolismo y la sensación de saciedad, haciendo que no tengamos la necesidad de comer a cada instante debido al contenido de antioxidantes, entre otras sustancias importantes para el organismo. Esto es muy importante cuando deseamos reducir el peso y mantenerlo controlado.
– Ajo: Contiene un alto grado de proteínas, por lo que su consumo fomenta la formación y reparación de tejidos. El consumo regular de ajo estimula el sistema inmunológico y ayuda a prevenir el resfriado y la gripe (por su contenido en potasio y vitamina C).
El ajo posee un sabor muy fuerte, lo que hace que la mayoría de personas lo consuma cocido, aunque la manera más recomendable para aprovechar sus cualidades medicinales es comerlo crudo.
El ajo es digestivo, bactericida, diurético e incluso es una excelente medicina para el colesterol malo.
– Té verde: el principal ingrediente activo del té verde favorece el control de peso y el metabolismo de la grasa corporal. El té verde es además diurético, antioxidante, previene el cáncer y el envejecimiento celular, disminuye el riesgo de enfermedades cardiovasculares y el colesterol y reduce el nivel de glucosa de la sangre.
– Café: La Cafeína puede ayudar a aumentar el metabolismo, aumentando la actividad de los músculos y el sistema nervioso. El café negro sin azúcar es preferible a otras formas de bebidas con cafeína (tipo refrescos de cola, etc). Se debe limitar su consumo de dos o tres tazas por día.
– Proteínas: El cuerpo consume más calorías digiriendo la proteína de la carne que digiriendo carbohidratos o grasas. Se ha demostrado que las personas que consumen una dieta alta en proteínas queman más del doble de calorías en las horas siguientes a su comida que al comer hidratos de carbono. MUCHO OJO con la cantidad de Proteínas diarias que consumáis, y siempre bebiendo abundante agua, ya que en exceso podrían perjudicarnos a nivel hepático y renal.
– Ácidos grasos omega 3: Este tipo de ácidos grasos esenciales se encuentra, en los pescados azules, como el salmón, las sardinas, el atún, así como en otros alimentos de origen vegetal como son las semillas de lino, las nueces, o la soya. Según se sabe, el omega-3 mejora la respuesta del organismo a la insulina, y estimula la secreción de leptina, hormona que ayuda a regular la ingesta de alimentos, así como el peso y el metabolismo.
– Pomelo: Hay buenas razones por las que tantas dietas animan a las personas a añadir el pomelo en su lista de alimentos consumibles — sólo la mitad de esta fruta jugosa ayuda a combatir la grasa, el colesterol y la arteriosclerosis (endurecimiento de las arterias). Un pomelo mediano contiene sólo 74 calorías; mientras que proporciona 15 gramos de fibra pectina, muchísima vitamina C, potasio y absolutamente cero grasas y sodio.
– Bayas: Las bayas son ricas en antioxidantes y mejoran el flujo sanguíneo, y a su vez ayudan a fortalecer los músculos. También mantendrán tu presión arterial dentro de unos niveles saludables. Además, tienen un bajo nivel de calorías (las moras tienen 74 calorías, los arándanos 81 calorías, las frambuesas tienen 60 calorías y las fresas 45).
– Alcachofas: Las alcachofas tienen un ingrediente llamado lnulina, éste es un carbohidrato que se encarga de controlar la cantidad de grelina que produce el cuerpo. La grelina es la hormona que se encarga de hacer sentir hambre o saciedad, y si no tenemos la sensación de hambre el cuerpo se dedica a quemar más cantidad de calorías.
– Brócoli: Además de tener mucho calcio (que se sabe que reduce la grasa), el brócoli también tiene muchísimas vitaminas C, K y A. Una ración de brócoli también te aportará bastante folato y fibra dietética, además de una diversidad de antioxidantes. El brócoli es uno de los mejores alimentos desintoxicantes que puedes añadir a tu dieta.
– Achicoria: Es una verdura con un nivel importante de agua, bajo contenido calórico, grasas y proteínas. Si te resulta difícil beber agua, quizá una opción sea consumir la achicoria. Usualmente se usa en ensaladas ya que combina perfectamente con otras verduras.
Contiene vitamina A y además intibina, compuesto amargo que estimula la secreción de jugos gástricos entre otras cosas.
– Apio: El apio posee muy poco valor calórico. Se usa mucho como condimento, sin embargo, desde hace algún tiempo también se incluye en muchos de los famosos “licuados para perder peso”, esto se debe porque contiene una sustancia que brinda saciedad e inhibe el apetito.
También se usa en ensaladas y sopas para bajar de peso dándoles un sabor muy agradable y refrescante.
A resaltar es que si se abusa con su consumo puede causar indigestión.
Recuerda que seguir una dieta variada, sana, equilibrada y bien estructurada hará que cuidemos de nuestra salud, que ha de ser nuestro principal objetivo.